lunes, 29 de noviembre de 2010

Avalon

 


Legendaria isla de en las historias artúricas





"Arturo descansa en paz en Avalon, custodiado por cuatro reinas hadas. Fata Morgana, de negro, consulta su libro de artes mágicas para curar las heridas del Rey "inmortal". En segundo plano, Merlín y la Dama del Lago".
- La muerte del rey Arturo, James Archer .


En la mitología galesa Avalon (Ynys yr Afallon) es el reino de los muertos, interpretado como “Isla de las manzanas”. También, en la mitología celta  los muertos vivían en una isla remota y el árbol del Más Allá por antonomasia era el manzano.

Posiblemente éstas tradiciones entronquen con la mitología griega y sus Campos Elíseos, que eran una parte de los infiernos, una sección del mundo subterráneo al que iban a parar las almas de los guerreros heroicos, donde morarían en medio de jardines de manzanas y paisajes floridos, gozando así de la felicidad eterna.


"El paso de la laguna Estigia" de Joachim Patinir (a un lado los Campos Elíseos y al otro el infierno)



 Avalon, aparece por primera vez en Historia de los reyes británicos de Geoffrey of Monmouth (1.136) como el lugar donde se forjó la espada del Rey Arturo, Excalibur. 
Más tarde el propio rey es llevado a la mítica isla, mortalmente herido, después de su última batalla  contra Mordred (Batalla de Camlann). Su cuerpo queda al cuidado de su hermana,  Morgana, reina de Avalon, y sus ocho hermanas (algunas con nombres propios y otras cuyos nombres no se mencionan: la Reina de las Tierras Baldías o la Reina de las Tempestades). 


 
Excalibur



 Geoffrey describe así el mítico lugar:
La isla produce todo tipo de frutos, los campos no necesitan del arado de los granjeros y todos los cultivos los provee la naturaleza. Produce por sí sola grano y uvas, y manzanos crecen en sus bosques sobre hierba bien cortada. [...] No cae ni granizo, ni lluvia, ni nieve. [...] La gente vive cien años o más. 


Los caballeros de la mesa redonda (reproducción medieval)



El autor enlaza así con la tradición de las islas paradisíacas de la antigüedad: ya en tiempos romanos existía la tradición de un santuario curativo, frente a las costas de Bretaña. Allí, al igual que en la isla de Geoffrey, vivían nueve hechiceras que curaban enfermedades.

Otras islas asociadas a esta tradición de islas paradisíacas son la Atlántida, el Jardín de las Hespérides o las Islas Afortunadas de los griegos. 



"El sueño del Rey Arturo" de Edward Coley Burne-Jones


Parece que las brumas de Avalon cubren con su mítico velo el lugar de reposo del Rey Arturo que
permanecerá en un ensueño hasta que su presencia sea requerida de nuevo en la tierra.




viernes, 26 de noviembre de 2010

Fotografiando América




Stephen Shore es uno de los más reconocibles fotógrafos estadounidenses del siglo XX. Capta escenas de la vida cotidiana, aparentemente banales como calles desiertas, encrucijadas, personas a primera vista anodinas, o gasolineras de carreteras secundarias.El bodegón de los pintores europeos se transforma  en un desayuno que se puede tomar en un motel de una ciudad de paso.
Su fotografía evoca un país de road movies y sus calles parecen platós de cine abandonados. A través de su mirada la extrañeza se transforma en fascinación.




 
Presidio, Texas - 21 febrero 1975




Bay Theater, Ashland, Wisconsin - 1973



Habitación 125, Westbank Hotel, Idaho Falls - 18 julio 1973




cruce de calles



Michael y Sandy Marsh, Amarillo, Texas




paisaje urbano



Calle 2 Este con South Main St., Kalispell, Montana - 22 agosto 1974


Beverly Boulevard con La Brea Avenue, Los Angeles - 1975


Trail´s End Restaurant, Kanab, Utah - 10 agosto 1973


aparcamiento después de la lluvia


West Ninth Avenue, Amarillo, Texas - 2 cotubre 1974









jueves, 25 de noviembre de 2010

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Valle Secreto

       ¿Quién no se acuerda del Valle Secreto?
         (Lo siento, no he podido resistirme)




     









Urville

Un autista "savant" (padece el síndrome de Asperger) de nacionalidad francesa, Gilles Tréhin, ha venido dibujando y documentando desde 1984 una ciudad imaginaria: Urville.




Urville es la mayor ciudad de Europa, está situada en la Costa Azul y tiene casi 12 millones de habitantes. Gilles a la edad de cinco años ya creaba objetos tridimensionales y cuando cumplió 12 empezó a dibujar una ciudad. Creó cientos de detallados dibujos de su urbe imaginaria e incluso la documentó social, cultural y geográficamente, dotándola con una completa historia de su fundación que se remonta al siglo XII a.C.

Centro de la ciudad









Fue fundada como "Carsucia" por fenicios aunque más tarde, bajo ocupación romana, pasó a denominarse "Urbis" y a situarse como la tercera ciudad más importante del Imperio Romano. Urville está dividida en más de 35 secciones y aloja las sedes de grandes  empresas (bancos, editoriales, compañías de petroleo, farmacéuticas, textiles...), posee varias universidades, más de 300 teatros y hasta palacio arzobispal.













Una de las muchas plazas







Sería un ejercicio interesante imaginarse viviendo en la ciudad que ha creado la mente de alguien, aunque bien pensado ya vivimos en ciudades que alguien  proyectó en su imaginación, generalmente con resultados descorazonadores.









martes, 23 de noviembre de 2010

Metrópolis



 En 1927, un austriaco llamado Fritz Lang planteaba una realidad urbana caótica para el 2026, con una ciudad estratificada donde se pueden reconocer distintos niveles de la sociedad, cada uno representado con una arquitectura determinada.



La metrópolis del siglo XXI que Fritz Lang ideó para su película nace de la fascinación por los edificios enormes y las luces de neón que vio en su primer viaje a Nueva York, pero además Metrópolis refleja los enormes conocimientos de arquitectura que tenía (su padre era arquitecto).
Fue un maestro en construir entornos imaginados que representaban en realidad estados de ánimo individuales o colectivos. Lang combinó (para reflejar la doliente lucha de clases del primer tercio de siglo) enormes rascacielos monumentales junto con edificaciones subterráneas en las que viven los obreros.




 Pocas películas han reflejado una desolación tan cercana a la realidad con esa representación del futuro en el que se esclaviza a las masas relegándolas a trabajos indignos en condiciones insalubres. 
Pero a Lang lo que realmente le interesaba mostrar, era la arquitectura que lo deslumbró en un viaje que hizo con su esposa a Nueva York un otoño de 1924: aquellos desafiantes rascacielos, enjambres de autovías y líneas de tren suspendidas en el aire.



 La sombra de Metrópolis es alargada, la encontramos en películas como Frankenstein, Blade Runner, Brazil, Demolition man, Matrix, Gattaca, Delicatessen y otras muchas. Aunque Metrópolis es la viva imagen de la distopía esa realidad está presente en nuestro mundo: una inmensa ciudad del siglo XXI, llena de lujos y opulencia, en la que la población se dedica a actividades filosóficas y al ocio. Sin embargo, oculta una terrible realidad: funciona gracias a una clase trabajadora, que vive esclavizada en una ciudad subterránea, sin ver el sol, y explotada en interminables turnos sin pausas.





Hay que tomárselo con calma